enero 13, 2021

Juchitan y CDMX 19S a un año

Ya un año de participar en conjunto con la brigada de rescate internacional Cancún en los operativos de apoyo a Oaxaca y CDMX por la afectación de los sismos ocurridos por estas fechas.
Ambos operativos muy diferentes y que me dejaron grandes experiencias, en Juchitán pude ver que las comunidades más pobres siempre son las más afectadas por la poca o nula capacidad de respuesta de sus instituciones, donde el pueblo mal acostumbrado al asistencialismo espera y esa espera genera enojo y encono en la población, como olvidar esa horchata de una señora de la 3era edad quien a las puertas de su casa donde las vende, y como fruto de ese trabajo había logrado construir un firme de casa, recuerdo que al llegar la familia estaba en la zona más insegura pero que erróneamente ellos creían más segura y después de realizar el análisis estructural se dieron cuenta de las condiciones reales de la vivienda, y de verdad recibir algo (un agua de horchata y un gran abrazo) de alguien que ha perdido gran parte de su patrimonio y todavía tener mucho que dar y sobre todo agradecer a la vida y a Dios para mí hizo que valiera la pena el viaje, ver como una comunidad se une y con los pocos recursos que tiene da y no se cansa de dar, verdaderamente Oaxaca es un tesoro nacional y no solo por su gastronomía y cultura si no y principalmente por su gente.
Ciudad de México apenas teníamos un día de haber regresado de Juchitán, cuando las alarmas volvían a sonar pero desde el principio este operativo fue diferente por la cobertura de los medios masivos, en la ciudad de Cancún y en general en Quintana Roo existe una gran cantidad de defeños, así que el apoyo no se hizo esperar eso hizo que el mismo lunes estuviéramos partiendo, mientras que en Oaxaca fue difícil conseguir el apoyo ahora llovían las donaciones (y que bueno) veníamos muy gastados, ya en la CDMX parecía que no había pasado nada pero al acercarnos a los sitios descubrimos la afectación de un sismo, trabajar un worksite como fue Álvaro Obregón 286 junto a los mejores equipos USAR no solo del país si no del mundo fue algo que nos planteó nuevas metas, fueron días de arduo trabajo donde mis compañeros dejamos todo tratando de corresponder a la multitud que entre aplausos y palabras de aliento nos había recibido y que cada cambio de turno al salir nos agradecía, de verdad que amo lo que hago y al final solo quedan los buenos recuerdos.